2- EL NIÑO ZURDO ANTE SUS PRIMEROS PASOS EN LA ESCRITURA

 

 

2.1 Escribir en el lado izquierdo o derecho del papel.


Por eso, es importante que tanto los padres como los educadores tengan claro que en un tanto por ciento muy elevado de casos, el cerebro del niño zurdo ya le ha determinado cual es la escritura que va a utilizar tanto en  el espacio temporal que usa como en el modo de hacerlo y de hecho ya ha empezado a usarla por buena, y que debe de modificar sus criterios cerebrales, más que los manuales, para adaptarse al nuevo cambio y, no nos cansamos de decir, empezar a utilizar una escritura que va contra su naturaleza.


En este caso, será necesario tanto por padres como por educadores, una especial sensibilización y mucha paciencia, para ayudar al niño en este cambio, que  puede  parecer  pequeño e insignificante, pero cuando hablamos de un tema cerebral, hay que dar los suficientes apoyos al niño para que este cambio sea lo menos traumático posible.



2.2 La escritura de espejo en el niño zurdo: causas y consecuencias.


Como consecuencia de este cambio de escritura, es muy probable que el niño zurdo varíe su forma de coger los instrumentos de escritura y adopte la forma de gancho para coger el lápiz o el boli (postura de mano invertida).


Esta postura el niño zurdo la puede adoptar como una forma inicial de coger los instrumentos de escritura desde su aprendizaje inicial, o puede ser una consecuencia del cambio de escritura de derecha a izquierda a la habitual de izquierda a derecha. En este caso, se puede hablar de dos factores para justificar el cambio a la hora de empuñar el lápiz:



      1.- Como una forma de sujetar el bolígrafo: en este caso se puede observar como el niño zurdo tiende a agarrar los instrumentos de escritura de forma cerrada como si se hablara de una forma de protección, llegando en muchos casos a cogerlo con el puño cerrado en torno al lápiz . Muchas veces el niño zurdo no encuentra otra forma de sujetar estos instrumentos, más que girando la mano hasta adoptar la forma de gancho para que no se le resbale el boli de la mano. En estos casos, la postura de la mano puede variar según  el grado de habilidad del niño No nos podemos olvidar que la forma de los instrumentos de escritura por norma general están hechos con una forma circular o hexagonal y por esa forma no están pensados para la mano izquierda donde se resbalan con facilidad, sino que están pensados para la mano derecha, de ahí la dificultad que tiene el zurdo para sujetarlos.

Como consecuencia de esta postura, donde el zurdo prioriza la sujeción sobre la escritura, los instrumentos de escritura no tienen la libertad necesaria para ejecutar su tarea, y por tanto, la letra resultante está caracterizada cuestiones:por las siguientes:



a) Es una letra muy junta y por norma general no guarda un patrón lineal sino que va escalonada sin guardar las pautas básicas.

b) Es una letra muy marcada. Como consecuencia de una postura tan forzada para coger los instrumentos, con una mano tan cerrada, el zurdo tiende a marcar mucho la letra y este marcado hace que sea una escritura muy lenta. Como consecuencia de esta escritura tan marcada, es habitual que tenga dificultades en clase, porque su capacidad compresora tiene que estar pendiente tanto de la palabra que está escribiendo como de las que está oyendo, y al no traducirse esto a una escritura de velocidad normal, sino que esta es muy lenta, inevitablemente nos lleva a que al final el niño zurdo se pierda en los dictados con más facilidad que un niño diestro.

c) Las presentaciones son muy malas con muchos borrones: al escribir en esta postura tan cerrada y darle tan poco movimiento a la mano, esta se va arrastrando por encima de lo que está escrito, y al hablar de materiales como la tinta o el carboncillo, inevitablemente ese arrastre produce que estas sustancias, al no dejarles un tiempo mínimo de secado, se acaben adheriendo a la mano y se difuminen en el papel, creando estos borrones.

d) Es una escritura a impulsos, sin ser armoniosa: cuando se adapta esta postura, el zurdo escribe arrastrando la mano, lo que unido a que es una escritura cerrada, hace que no haya una distancia suficiente entre la mano, el lápiz y el papel, y que esta poca distancia se traduzca en una escritura donde la mano se mueve a la vez que el lápiz, y este movimiento es más nervioso contra más rápida es la escritura. Por el contrario, cuando ponemos el lápiz en distinto plano que la mano, esta escritura es mas armoniosa al haber mayor distancia entre ambos elementos.

 

      2.- Una forma de ver lo que se está escribiendo: al escribir de izquierda a derecha, el zurdo tapa con su mano la luz y no ve lo que está escribiendo. Esta situación la soluciona el zurdo si escribe con la postura de gancho, ya que de esta forma puede ver lo que está escribiendo. De la misma forma que antes, el grado de apertura del gancho va a depender de la habilidad que tenga el zurdo para ver antes la escritura.

       Podría parecer por todo lo expuesto que esta postura es la más idónea para las personas zurdas y de hecho se acepta como un patrón común para todos los niños zurdos. Sin embargo, esta situación no deja de ser como si dijéramos un "parche" que buscan tanto el niño zurdo, por falta de conocimiento, como sus padres y educadores, que buscan que el niño zurdo pase este trance cuanto antes, y escriba sin importar el cómo.

       Cuando un niño zurdo adopta la postura de "gancho" para escribir, lo que en realidad está haciendo es forzar la parte superior izquierda de su cuerpo sin ninguna necesidad, y lo que es más importante, sin darse cuenta.

       Esta simple acción implica que el niño zurdo fuerce determinadas  partes de su cuerpo, las cuales veremos en el siguiente punto.

 

2.3 Los condicionantes externos en la escritura del niño zurdo.

 

•La cabeza: el niño zurdo, tiende a inclinar la cabeza hacia la izquierda para seguir con su vista la escritura

El cuello: por correspondencia, el cuello mientras el niño zurdo escribe, acompaña a la cabeza en su movimiento.

El hombro: la postura de gancho no es una postura  natural, y por tanto, el zurdo debe de forzar esta parte del cuerpo hasta adaptarla al grado de inclinación del "gancho". Contra mayor es el grado, mayor es la torsión del hombro.

El brazo: es la parte del cuerpo que más sufre en esta postura, porque es el que está realizando todo el esfuerzo ya que esta puesto en una postura forzada no natural, y es el que provoca por su importancia en esta acción, que el niño zurdo se agote en esa postura.

La muñeca: otra parte importante, que está en completo esfuerzo, y trabajará más o menos en función del grado de apertura del "gancho" que el niño zurdo le dé a su escritura.

La mano: es la parte más importante porque es la que plasma todo el esfuerzo del tronco superior izquierdo en la escritura. Es la encargada no sólo de transmitir al papel todo lo que le manda el cerebro, sino que es la encargada de que esta transmisión se haga con la suficiente claridad como para que lo se plasme en el papel sea legible para todo el mundo. Es la parte sin duda donde más claro se ve la postura de gancho, y según la mano esté más abierta o más cerrada, en consecuencia el grado del "gancho" será mayor o menor, y en consecuencia, ese grado de apertura, va a influir en el resto del cuerpo, que estará más o menos forzado según este grado sea mayor o menor. Asimismo, según la fuerza de sujeción del instrumento de escritura, contra más fuerte sea esa sujeción, mas estará el niño zurdo forzando su cuerpo, y por eso, la fatiga será mayor.


Como bien se puede ver, es importante que tanto los padres como los educadores tomen conciencia de estos datos, antes de permitir al niño zurdo que por costumbre, adopte esta postura, que como bien se puede ver, no es tan beneficiosa para el zurdo.

Con todo, no es este el único problema que encuentran los niños zurdos para escribir. En relación a este tema es importante resaltar  que los principales problemas a los que se enfrenta una persona zurda a la hora de escribir, tienen que ver con cuestiones  que van desde la iluminación, la colocación del papel, hasta la postura que adopta el zurdo a la hora de sentarse.

 

 

Punto 1                                                                                             Punto 3